(por Santiago Alonso).- La emisora que supo albergar a importantes personalidades del mundo del periodismo y la cultura hoy atraviesa un momento de gravedad extrema: si no consiguen inversores la radio se cierra.
Ubicada en el 1030 del dial, Radio del Plata está “a punto de sufrir el mismo destino que Radio América”, (hoy con sus equipos apagados producto de la desinversión), aclara una persona que trabaja allí desde hace varios años y solicitó a este medio no difundir su nombre. “A nosotros nos deberían haber arrimado algo más de dinero pero lamentablemente no hay miras de que nos paguen. La semana pasada nos dieron el 20% en efectivo e hicimos cola adentro de la radio del sueldo de Febrero y juntaron a los de 360, a los pobres de 360 (el canal digital de contenidos de pantalla casi muerta por los mismos motivos que Del Plata) para darles parte de lo adeudado. Los que trabajan los fines de semana directamente no recibieron nada por no acercarse”, declaró.
El panorama es desolador y tiene su origen en el vaciamiento por parte de la empresa Electroingeniería que está llevando a cabo una tarea similar a la realizada por el grupo Spolzki y Garfunkel con Radio América, CN23, FM Rock and Pop y Diario Tiempo Argentino, cuyos empleados se quedaron sin trabajo o sin cobrar, salvo por el caso del diario con el que armaron una cooperativa (llamada “Por Más Tiempo”) para mantener el medio activo y sostener fuentes laborales.
Días atrás el portal de radios Radio Cut subió un audio en el que Raúl Kollmann contaba lo que pasaba en la radio junto a la locutora Verónica Rosales quien se quebró en llanto en el aire afirmando que “hace 17 años que trabaja allí y hoy fue a la radio caminando”.
Ante esta situación, figuras como Gustavo Silvestre o Darío Villaroel migraron a Radio 10. Otros como Alejandro Dolina dejaron intempestivamente su ciclo y el conductor de “La Venganza será terrible” salió al aire por teléfono antes de emitir un programa grabado para aclarar que esa iba a ser la última emisión allí.
“Nos deben Febrero, ahora nos van a deber marzo. Nos deben el aguinaldo. No están pagando las obras sociales ni aportes provisionales. ¿Qué miras hay? Dicen que la quieren vender pero hay que ver que condiciones piden los Ferreira para la venta.”, detalla nuestra fuente. (Nota de la redacción: se refiere a Sebastián y Gustavo Ferreira, propietarios de Electroingeniería)
“La radio tiene gran deuda y es mas, no sabemos cuando nos van a desalojar del edificio por que no están pagando el alquiler. Ferreira propuso reducir el sueldo, pagar los haberes en cinco cuotas, reducir el personal en un 30%. ¿Quién va a aceptar eso? Es una locura. Hay mucha gente con muchos años de antigüedad. Nos están arrinconando y el ENACOM (Ente Nacional de Comunicaciones) no está resolviendo el tema y el Ministerio de Trabajo tampoco. Son 140 empleados”
Del Plata continúa con una programación casi de emergencia con envíos diarios como “Caballero de Dia” (de 06 a 09 con Roberto Caballero) o “Siempre es hoy” (de 09 a 12 con Daniel Tognetti), “El Mediodía de Del Plata” (De 12 a 14 con Carlos Polimeni) y “La vuelta de Zloto” (de 16 a 19), entre otros, pero los demás trabajadores realizan paros en la radio para que algunos ciclos dejen de salir al aire de manera rotativa como medida de fuerza. Otros métodos utilizados implican la emisión de un spot que explica de manera resumida lo que ocurre y la lectura de comunicados en el aire.
Del Plata supo albergar en su grilla a periodistas como Nelson Castro, Jorge Lanata, Adolfo Castelo, Pepe Eliaschev, Fernando Bravo, Alfredo Leuco, Lalo Mir, Liliana López Foresi, Cristina Perez y al gran Juan Alberto Badía.
Quienes mostraron solidaridad en el aire de sus programas fueron Nelson Castro en Radio Continental y Reinaldo Sietecase en Vorterix y actualmente en Radio Con Vos.
Existieron reuniones con la CGT y distintos bloques políticos para obtener ayuda, por ahora sin avanzar demasiado. Brevemente se dispersó el rumor sobre una posible compra de Grupo Índalo del empresario Cristóbal López, propietario de Radio 10, C5N, Pop Radio, Mega, Vale y Radio One, pero fue desmentido.
El nivel de virulencia visto en las redes a raíz del desmantelamiento de medios por su línea editorial es preocupante ya que no siempre el medio es el mensaje. Por un lado están los laburantes y por otro los empresarios y propietarios de los medios. Muchas veces la línea editorial coincide con la ideología de los periodistas y otras todo lo contrario y se ven obligados a moverse dentro de esa línea. Como sea, el cierre de un medio es siempre una pésima noticia.